FUEGO DE SANGRE (Enemigos Oscuros 2)
1
Diecisiete largos años sin sentir su piel, diecisiete
primaveras sin respirar su esencia, otros tantos inviernos sin el aliento
cálido de su respiración… Había perdido todas las esperanzas de que finalmente
viniese, que cumpliese su promesa de regresar a rescatarla, de que incluso estuviese
vivo. Se sentía sola, abandonada, ultrajada, no sabía si tendría fuerzas para
seguir así… sobreviviendo sin él, por el resto de la eternidad.
Aun
así, sentía que su corazón seguía latiendo, sabía que vivía, pero ¿dónde estaba? ¿No había pasado ya demasiado tiempo? ¿No la había castigado la vida ya
suficiente tiempo sin sentirse viva de nuevo a su lado?
Sasha
sabía que Marc era demasiado testarudo como para haberse dado por vencido,
sumamente poderoso para dejarse atrapar durante tanto tiempo. Aunque 17 años no
eran mucho para un vampiro, ya empezaba a doler tanto que, no le permitía
concentrarse en otra cosa que no fuera recordarlo. Sabía que lo perdería el día
que al levantarse no recordase su sonrisa, cosa que no había sucedido en una
sola ocasión.
Tal
vez lo retenían contra su voluntad, tal vez… Borró esa idea de su mente. Había
pasado demasiado tiempo, para que estuviese vivo… Europa era diferente. Llevaba
enclaustrada en un vetusto palacio en Europa central más de quince años,
soportando día tras día la mezquindad de aquel que hacía llamarse su amo. Las
cosas aquí habían resultado ser demasiado diferentes, demasiado mortíferas.
Sasha creyó que acabaría en manos de Radgüll o Pierre, así que hizo lo peor que
hubiese hecho aquel que necesitase romper un pacto con el mismísimo diablo:
aliarse con el mismísimo Satanás. Tuvo que hacerlo para sobrevivir. En aquellos
momentos tenía que escapar de aquellos que la perseguían dentro del barco.
Ahora que miraba atrás, tal vez hubiese sido mejor dejarse capturar por
aquellos malnacidos que la habían separado de Marc. Pensó en Radgüll, con
alivio, al menos él la amaba y la hubiese tratado algo mejor. “Algo” ya era
mucho cuando uno no tenía nada, cuando te habían desprovisto de cada ápice de
cariño, de compasión.
Sasha
se lamentó de su aciaga existencia, de la desidia que la rodeaba, cuando ella
lo había sido todo para muchas personas, sobre todo para Marc, su Marc… Pasó el
cepillo sobre su pelo como queriendo despejar los desplantes, torturas y
vejaciones que ese ponzoñoso miembro del clan de los antiguos le había
proferido a lo largo de los años.
Al
principio fue dulce, a la par que siniestro, pero se podía soportar. Ahora,
estaba obsesionado con ella, no la dejaba ni bajar a las demás estancias a socializar
con otros vampiros, ni siquiera dentro del castillo. Como un eremita condenado
a un aislamiento religioso, ya no recordaba la última vez que puso un pie en el
exterior de aquella cárcel. Encerrada en aquel torreón, solo tenía la compañía
de él cuando le apetecía satisfacer su sevicia o sus más bajos instintos. Si le
hubiese sido posible, se habría arrojado por la ventana, a pleno sol del
mediodía. Si no moría reventada contra el suelo, el sol habría acabado con su
sucinta agonía al estrellarse contra el adoquinado suelo del patio que rodeaba
el castillo.
Avram
Hatvani la había seducido con sus buenos modales, su vehemencia, y tal vez con
un magnetismo y un poder mental superior, que solo podían dominar los vampiros
con más de un milenio de edad. Avram procedía de Transilvania y era uno de los
siete miembros del sempiterno consejo de los antiguos; la Dieta, como era
conocido comúnmente el consejo. El nombre era debido a que sus miembros eran
tan longevos, fuertes y poderosos que ya no necesitaban alimentarse de sangre
humana para sobrevivir. Sus cuerpos habían entrado en un estado de inmortalidad,
aparentemente eterna, tras haber estado alimentándose de sangre humana durante
cientos de años. No había clan o ser alguno sobre la faz de la tierra que
pudiese comparárseles. Cuando estaban juntos eran estandartes libertinos,
licenciosos, taimados, leguleyos, adoradores de la opulencia y la eterna
juventud. Nadie sabía realmente cómo se había formado aquella exangüe unión. Lo
cierto era que aquellos seres se habían ido encontrando a lo largo de los
tiempos, y habían decidido respetarse y llegar a entenderse a pesar de sus
diferencias y aspiraciones. Todos ellos poseían una fortaleza extrema y poderes
o habilidades que ensombrecían aquellos veneficios o hechicerías de los
conjuradores más fuertes. Rara vez los mostraban delante de otros vampiros; sin
embargo, todos los temían. Disponían de un ejército de fieles correligionarios
que se manchaban las manos para que sus deidades obtuviesen aquello que
desearan poseer en un momento concreto.
Sasha
se había arrojado a sus brazos, suplicando protección. Al legendario vampiro le
llamó la atención su extrema belleza y su coraje al desafiarlos a todos nada
más llegar de los Estados Unidos. Sasha había querido escapar de Marie, Pierre,
Radgüll y aquel enjambre de malévolos vampiros. Avram había sido su única
esperanza en aquellos momentos. Destrozada por la incertidumbre de saber si
Marc vivía o no. Necesitaba un protector
hasta que viniese a su encuentro. Rodeada por decenas de encorajados vampiros,
aquella pareció ser su única alternativa. No sabía entonces que había
abandonado una manada de lobos para meterse en las fauces del rey de la selva.
Durante todo el trayecto trataron de romper el espurio encantamiento que Marc
había creado. Finalmente consiguieron entrar, pero Sasha se las apañó para
escapar hasta el muelle, donde Avram esperaba a los recién llegados. Cayó en
sus brazos y le suplicó protección. Avram se sobrecogió por su ímpetu, y no
pudo negarse; al igual que sus perseguidores tuvieron que dejarla ir a
regañadientes, se trataba del jefe de todos los vampiros: el longevo Avram.
Sasha descubrió, a los pocos días, que en Europa no solo habría
tenido que haberse escondido de Radgüll y sus amigos, sino también de los hechiceros
caza-vampiros que buscaban a los vampiros para acabar con ellos. Esos cazadores
eran más expertos que los americanos, aunque no solían traspasar las fronteras
con Alemania. El antiguo imperio austrohúngaro
era su fortaleza. El reino de los vampiros más longevos, que ningún conjurador
se atrevería a invadir.
--Continuará--
No olvidéis que pronto subiré a Amazon el teaser gratuito con los dos primeros capítulos. Pronto muy pronto sacaré la obra completa. Un abrazo a todos. espero que os haya gustado, aunque sepa a poco.
Ya estoy deseando leerlo *___*
ReplyDelete¿Que habrá pasado con Mark? Estoy intrigada.
Nos vemos <3
Serás de las primeras eso ni que dudarlo, un besote, guapa!
ReplyDelete17 años wow me siento intrigada x saber qué paso con Marc , espero lo publiques pronto ☆☆☆☆☆100% recomendable :)
ReplyDeleteGracias por leer la SAGA Jazmin, me encanta tu nombre, una prima mía se llama igual, pronto saldrá publicado en el mes de Junio, espero que a finales!! Ya os avisaré.
ReplyDeleteUn abrazo.